6 de agosto de 2012

Método hipotético deductivo


El método hipotético deductivo es el procedimiento o camino que sigue el investigador para hacer de su actividad una práctica científica.
Consta de varios pasos que obligan al científico a combinar la reflexión racional (formulación de hipótesis y deducción) con la observación de la realidad o momento empírico (observación y verificación).
A partir de las ideas de Francis Bacon se consideró que la ciencia partía de la observación de hechos y de esa observación repetida de fenómenos extraían por inducción.  En el método hipotético deductivo se plantea que una hipótesis se puede analizar deductiva o inductivamente.
Posteriormente, Karl Popper (1902-1994) rechaza la posibilidad de elaborar leyes generales a partir de la inducción y se obtiene que en realidad esas leyes generales son hipótesis que formula el científico y que utilizan el método inductivo de interpolación para, a partir de esas hipótesis de carácter  general, elaborar predicciones de fenómenos individuales.
En esta concepción del método científico es ventral la falsabilidad de las teorías científicas (es decir, la posibilidad de ser refutada por experimentación). En el método hipotético deductivo, las teorías científicas nunca pueden considerarse verdaderas, sino a lo sumo “no refutadas”.

Una investigación sobre los salmones



1)¿Cuál es el problema que plantean los investigadores?
2)¿Cuáles son las hipótesis planteadas por los investigadores?
3)¿Qué métodos se utilizan para contrastar las hipótesis?
4)¿Cuál fue el resultado de la investigación?
5)¿Por qué puede afirmarse que las hipótesis nos sirven de guía para la investigación realizada?


1) El problema es cómo logran los salmones ir desde el Océano Pacífico a su río natal (considerando que hay siete ríos que desembocan en el Pacífico).
2) Las hipótesis principales son H1, la llamada hipótesis visual, que afirma que los salmones reconocen su río natal debido a su memoria y al estímulo visual que reciben cuando encuentran la desembocadura del río correspondiente.
H’1, la hipótesis olfativa, que sostiene que los peces reconocen su río exclusivamente por medio de sus ganglios olfativos.
H’’1, la hipótesis olfativa-táctil. Algunos investigadores creyeron que los ganglios olfativos de los salmones tienen una capacidad muy exigua para cumplir su función orientadora y que ésta debía estar complementada con la de un órgano táctil ligado al llamado “cordón de plata”. Así, esta hipótesis dice que el olfato o el tacto por separado no son suficientes para explicar por qué el salmón reconoce su camino, pero que ambos, actuando a la vez, sí lo explican.
3) Para contrastar la hipótesis H1, se basaron en su hipótesis derivada H2, la de la obstrucción visual negativa, que dice que si se suprime el sentido de la vista, los peces no encontrarían su camino. A los peces se les obstruyó la visión para ver qué ocurría, y estos reconocieron el río que les correspondía, quedando refutada la consecuencia observacional y con ella, la hipótesis.
Para la H’1, se basaron en su hipótesis derivada H’2 (de la obstrucción olfativa negativa, que afirma que si se les impide el ejercicio funcional a sus ganglios olfativos, no reconocerán el río). Se realizó una observación pertinente nº2 y se comprobó que los peces no encontraron su camino. La H’1 quedó corroborada (al igual que H’’1). Pero al corroborarse H’’1, H’1 fue refutada.
4) Se concluyó que los peces logran reconocer el camino gracias tanto a su sistema olfativo como al táctil.
5) Porque ante la falta de conocimiento científico, las hipótesis nos sirven para encontrarlo o para encontrar afirmaciones que se acerquen a él. Las hipótesis, que comienzan como suposiciones, se ponen a prueba y se las refuta o verifica con el fin de llegar (o acercarse) a la verdad.

2 de agosto de 2012

Hipótesis e investigación científica

Una hipótesis científica es una proposición aceptable que ha sido formulada a través de la recolección de información y datos, aunque no esté confirmada, sirve para responder de forma alternativa a un problema con base científica. Una hipótesis se caracteriza por lo siguiente:
a) Una hipótesis científica es un enunciado afirmado o formulado por alguien, en cierto lugar, en ciertas circunstancias y en cierto momento de la historia.
b) En el momento en que se propone una hipótesis, no está verificada ni refutada.
c) Quien formula la hipótesis supone que es verdadera (aunque esto no significa que necesariamente crea en ella).


La investigación científica se realiza en una serie de pasos, estos son:
I) Se hallan observaciones intrigantes.
II) Obtención de más casos o datos observacionales
III) Formulación del problema (por qué existen estos casos intrigantes y cuál es su causa)
IV) Formulación de una hipótesis.
V) Deducir nuevos enunciados a partir de la primera hipótesis o hipótesis de partida.
VI) Formulación de hipótesis derivadas.
VII) Obtención de consecuencias observacionales (si las hay).
VIII) Observaciones pertinentes.

A partir de las observaciones pertinentes, puede ocurrir la refutación y descarte de la hipótesis, o la corroboración. Si la hipótesis se corrobora, quiere decir que demostró no ser falsa, pero aún así tampoco asegura que sea verdadera; por esto se hacen nuevas observaciones y deducciones, y la investigación prosigue hasta que la comunidad científica deja la contrastación y ya no se considera a la hipótesis como un problema epistemológico.

La base empírica de la ciencia

1) ¿A qué llamamos base empírica de la ciencia y a qué zona teórica? Define sus elementos.
2) ¿Por qué existe tal distinción? ¿Es alguna más importante que la otra?
3) ¿Qué relación existe entre observación y un objeto teórico propuesto por una teoría?
4) Explicar los requisitos de la observación científica.
5) Explicar la controversia que expone el autor.


1) La base empírica es el conjunto de objetos que potencialmente pueden ser conocidos directamente. La zona teórica son aquellos objetos que exigen estrategias indirectas y mediatizadoras para su captación.

2) La base empírica se modifica a medida que transcurre la historia, debido al surgimiento de nuevos procedimientos técnicos que nos permiten observar de distinta manera.
    Una cuestión que cabe señalar es el distinto grado de énfasis que se puede pensar en los aspectos empíricos y teóricos de la ciencia. Desde el punto de vista práctico o tecnológico, la base empírica es primordial y la zona teórica circunstancial. Los problemas técnicos de la vida diaria están relacionados con la base empírica, son los objetos que nos rodean y las situaciones cotidianas que ellos nos presentan. Pero cuando tratamos acerca del conocimiento y contemplamos la realidad desde un ángulo más filosófico, los objetos teóricos adquieren mucha mayor relevancia. El conocimiento profundo se vincula con el aspecto teórico de la ciencia, y la observación resulta subsidiaria.
   En resumen, ninguna es más importante que la otra, todo depende de qué punto de vista se tenga en cuenta.

3) Detrás de una observación hay siempre una explicación o marco teórico de aquello que queremos observar.

4)Efectividad: este requisito exige que la verdad o falsedad de la afirmación sobre el suceso o el aspecto de la base empírica a los que nos estamos refiriendo pueda ser dirimida en un número finito de pasos. Se presupone de un método efectivo que "decida por sí o por no", siendo este método la posibilidad de observación.
Repetibilidad: afirma que los datos que importan a la ciencia deben tener la posibilidad de ser repetidos. Un dato único, irrepetible, no inspira confianza. Pero si es repetible y lo que se afirma a propósito del dato se afirma también en sus repeticiones, tendremos una base confiable.
Intersubjetividad: ningún dato puede provenir de un único captador del mismo, es decir, debe ser posible para todo dato haber sido observado por más de un observador.

5)El autor plantea la disputa relacionada con el plano lingüístico. Esta gira en torno a la cuestión de si hay términos empíricos u observables y teóricos, nítidamente diferenciados según el tipo de entidades a las cuales dichos términos hacen referencia. La crítica apunta a negar la afirmación de que, tomar un dato, desde el punto de vista epistemológico, implica la no existencia de presupuestos teóricos.
   Se argumenta que esto es totalmente imposible, pues no hay dato que no tenga contaminación teórica o presupuestos tácitos. En palabras más simples: no habría dato independiente anterior a las teorías.


15 de abril de 2012

Platón: El dualismo sensible-inteligible



Platón distingue dos modos de realidad, una, a la que llama inteligible, y otra a la que llama sensible. La realidad inteligible, a la que denomina "Idea", tiene las características de ser inmaterial, eterna, y constituye el modelo o arquetipo de la otra realidad, la sensible o visible, constituida por lo que ordinariamente llamamos "cosas", y que tiene las características de ser material, corruptible (sometida al cambio, esto es, a la generación y a la destrucción), y que resulta no ser más que una copia de la realidad inteligible.
La primera forma de realidad, constituida por las Ideas, representaría el verdadero ser, mientras que de la segunda forma de realidad, las realidades materiales o "cosas", hallándose en un constante devenir, nunca podrá decirse de ellas qué son verdaderamente. Además, sólo la Idea es susceptible de un verdadero conocimiento o "episteme", mientras que la realidad sensible, las cosas, sólo son susceptibles de opinión o "doxa".


Lo inteligible


En cuanto a las Ideas, en la medida en que son el término de la definición universal representan las "esencias" de los objetos de conocimiento, es decir, aquello que está comprendido en el concepto; pero con la particularidad de que no se puede confundir con el concepto, por lo que las Ideas platónicas no son contenidos mentales, sino objetos a los que se refieren los contenidos mentales designados por el concepto, y que expresamos a través del lenguaje. Esos objetos o "esencias" subsisten independientemente de que sean o no pensados, son algo distinto del pensamiento, y en cuanto tales gozan de unas características similares a las del ser parmenídeo. Las Ideas son únicas, eternas e inmutables y no pueden ser objeto de conocimiento sensible, sino solamente cognoscibles por la razón. No siendo objeto de la sensibilidad, no pueden ser materiales. Y sin embargo Platón insiste en que son entidades que tienen una existencia real e independiente tanto del sujeto que las piensa como del objeto del que son esencia, dotándolas así de un carácter trascendente. Además, las Ideas son el modelo o el arquetipo de las cosas, por lo que la realidad sensible es el resultado de la copia o imitación de las Ideas.

Lo sensible


Por su parte la realidad sensible se caracteriza por estar sometida al cambio, a la movilidad, a la generación y a la corrupción. El llamado problema del cambio conduce a Platón a buscar una solución que guarda paralelismos importantes con la propuesta por los filósofos pluralistas: siguiendo a Parménides hay que reconocer la necesaria inmutabilidad del ser, pero la realidad sensible no se puede ver reducida a una mera ilusión. Aunque su grado de realidad no pueda compararse al de las Ideas ha de tener alguna consistencia, y no puede ser asimilado simplemente a la nada. Es dudoso que podamos atribuir a Platón la intención de degradar la realidad sensible hasta el punto de considerarla una mera ilusión. La teoría de las Ideas pretende solucionar, entre otros, el problema de la unidad en la diversidad, y explicar de qué forma un elemento común a todos los objetos de la misma clase, su esencia, puede ser real; parece claro que la afirmación de la realidad de las Ideas no puede pasar por la negación de toda realidad a las cosas.